No puedo amarte más, y eso duele
Ahueco mis manos para contener tú ser.
Sopesando tu pura intimidad.
Sos todo lo que puedo querer
Y mucho más…
Soñar, un campo verde, la calma, el mar.
La furia, una ilusión y tu cuerpo al
despertar.
Pero no puedo amarte más, y eso duele.
Algo al menos puedo, y también sé que me lo
permitirás:
Cosechar tu miel hasta quebrarte,
alcanzando el cielo…
Sabor mágico, de puños apretados, de más,
más y más…
Un juego doloroso.
Sufro amarte.
Siento que es poco lo que yo te puedo
dar.
Parece mentira lo que ansié tenerte
y ahora un inútil me siento.
Cada gesto que desnudo con sólo mirarte,
Cada grito contenido que surge como
sufriendo,
Todo es poco, y nada, nunca, es
demasiado.
Esa brevedad eterna, desfalleciente y fugaz.
Sos la dueña y así vos me lo regalás.
No puedo amarte más, y eso duele…
Deseo entrar, deslizándome en tu sabor,
Donde se funden los sentidos.
Piel con piel, poro a poro, calor con
calor
Hasta estallar.
No puedo amarte más, y eso duele
Rezo que alcance, pero no.
Duele no poder amarte más.
Tu color, esa tibieza, las formas.
Y aquel
sabor…
Es injusto que tanto me des.
Y que tan poco yo te pueda dar.
Gloria es mirarte, sentirte, tenerte…
No puedo amarte más, y eso duele,
Lo voy a intentar una vez más.
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